Lan, corazón de Low Cost

La chilena fija estrategias de bajo costo en Sudamérica

La compañía aérea Lan se creó en Chile, sus orígenes datan del año 1932 con el nombre de Línea Aérea Nacional (LAN Chile). Es a partir de la década de los 90, luego de su privatización, que esta compañía inicia su expansión vertiginosa; en la misma década, ya dominaba cerca del 60% del mercado doméstico chileno. Posteriormente, en el año 1999 la aerolínea empieza su internacionalización e ingresa al mercado peruano; en poco tiempo (año 2002) ya era dueña del 50% de la torta.

Actualmente, la compañía Lan está presente en Chile, Argentina, Ecuador y Bolivia, con un gran porcentaje de participación de mercado en cada uno de estos países. Si analizamos Chile, por ejemplo, esta compañía, propiedad del grupo Cueto – Piñera, posee el 75% de los vuelos domésticos y el 55% de los vuelos internacionales, en el país sureño. Sin embargo, los especialistas concuerdan que en este momento es una de las compañías aéreas con mayor crecimiento de Región Latinoamericana. La estrategia de penetración de mercados usada por la aerolínea fue casi la misma – por no decir la misma – en todos los países a los que ingresó. Las acciones se desarrollaban según los requerimientos específicos de cada país; lo cual quiere decir que en el Perú tarde o temprano se llegará a similar situación que en el resto de naciones.

¿Caparazón de Low Cost?

La compañía chilena cada vez adopta más estrategias empleadas por las aerolíneas tipo low cost. De acuerdo a Lan, esta reducción de tarifas sigue la tendencia internacional que desarrollan las aerolíneas Low Cost, lo cual no significa que la se transforme en una de ellas, sino que contempla tomar lo mejor de dicho modelo para adecuarlo al de la chilena. La táctica comercial de Lan implica la compra de nuevos aviones (32 unidades), ampliación de los vuelos directos (sin escalas) de día y noche, así como de la disminución del tiempo de espera en tierra de los aviones. Este plan – que se aplica actualmente en Chile – pretende transportar 50% más de pasajeros en los próximos dos años y aumentar sus ingresos en 30% hasta el 2008. Por supuesto, la rebaja de las comisiones a intermediarios (agencias de viajes) también se efectuó, no sólo en Chile, sino en el resto de países. Sin embargo, la Asociación Chilena de Empresas de Turismo – con mucho más peso que cualquier equivalente peruana – denunció drásticamente una virtual monopolización del mercado aéreo chileno; por ello Lan desistió en su intento de rebajar las comisiones del 6% a 1%. Isabel Bechler, directora comercial de AirComet en Chile, indicó que sus aliados estratégicos son las agencias de viajes, con quienes trabajarán estrechamente para fijar nuevos desafíos, ya que ellas deben sentirse muy apoyadas por parte de las aerolíneas.
Para nadie es un secreto que el Perú no tiene una de las economías más sólidas en Sudamérica, a pesar de que sus dos últimos gobiernos la mantienen estable. Países como Brasil, Argentina, Chile, Colombia o México incluso; poseen las economías más fuertes de la Región. La pregunta entonces cae por su propio peso: ¿el Perú está preparado para la inversión aerocomercial?La táctica que usó Lan en cada país se manifestó a través de dos acciones utilizadas también por la compañías Low Cost: ingresar con tarifas rebajadas – obviamente menores que la competencia – y luego disminuir las comisiones que pagaban a los intermediarios (agencias de viajes). En el país de origen de la aerolínea se desata una gran batalla por lograr la mayor participación del mercado (nacional e internacional), es por ello, que las empresas aéreas (Sky Airlines, Air Comet, Aerolíeas del Sur, entre otras) orientan sus estrategias comerciales por las promociones y precios bajos. En la Argentina, se produce una batalla feroz entre los grupos Marsans y Cueto – Piñera. Pero ¿por qué no ocurre lo mismo en el Perú? Simplemente por que el mercado no lo requiere.
En el Perú, Lan es dueña casi del 60% del mercado internacional y tiene aproximadamente el 50% del mercado nacional. Su presencia en el Perú es tan sólida que se da el lujo de rebajar temporalmente sus tarifas cada vez que se esboza algún intento nacional por ingresar al ruedo; recordemos lo sucedido con Wayra Perú, Lan rebajó sus tarifas hasta que el rival no pudo soportar. La competencia que aún sobrevive son Aerocondor y Starperú, pero no le quitan el sueño al gigante sureño, porque las vicisitudes que éstas deben sortear para poder ser rentables agotan todos sus esfuerzos, dentro de un mercado todavía pequeño. En Chile por ejemplo, desde el mes de abril Lan bajará sus tarifas hasta en un 40%.Ocurre todo lo contrario en Argentina, ya que después del ingreso de Lan, el grupo Marsans (Air Comet, Aerolíneas del Sur y Aerolíneas Argentinas) le respondió con la misma moneda: guerra de tarifas. Voceros del grupo Marsans señalan que su compañía apuesta por la búsqueda del mix entre mejor servicio para sus pasajeros acompañado por precios menores; y haciendo hincapié en que no sacrifican el servicio por un menor precio. Lanperú entró recientemente a Bolivia, e inmediatamente generó una guerra de precios, desatando la protesta de Aerosur; ya que sus representantes manifestaron que esta situación afectará a las aerolíneas bolivianas. Sin duda, en mercados menos resistentes y por ende más pequeños, es más difícil contener la estrategia de precios bajos. Por lo pronto, en el Perú ya se dieron la baja de comisiones para las agencias, todavía no es necesario rebajar los precios debido a que Lan no tiene mayor competencia; sin embargo, este panorama podría cambiar en un futuro próximo. Carlos Palacín, presidente de la Asociación Peruana de Empresas Aéras (APEA) reiteró innumerables veces – casi hasta el cansancio – que el mercado peruano está suficientemente atendido, la oferta de asientos supera a la actual demanda y por lo tanto no se requieren más competidores. Claro con una visión así, tampoco podemos esperar que las aerolíneas nacionales perturben los sueños de los directivos de Lan. Como se suele decir, Lan tiene para rato.